La Razón de Ser Promotor de la Paz

En el Ocaso del año 2017

Al leer las noticias en los medios impresos y electrónicos, de lo que sucede a nivel internacional, nacional y local, es de llamar la atención el nivel de violencia de la sociedad contemporánea, el cual la escalada de conflicto en el plano de lo social y colectivo, se ha elevado, y en la mayoría de los casos traen efectos colaterales de preocupación, no tanto de daños materiales,  y/o económicos, sino de carácter emocional y moral, que tiene consecuencias a veces alimentar las vías de enfrentamiento con causas lamentables.

Esos enfrentamientos trae un desgaste  hacia nuestras instituciones y, perdida en la credibilidad, caemos en el diario discurso dejar hacer, dejar pasar por la apatía de ya hacerse costumbre el vivir en zonas de confort del conflicto.  

Ante esa corriente de violencia y agresión, ya hace unos años atrás ha surgido los servicios de la diplomacia, en el sentido de la negociación a través de los medios alternos de solución de controversias, desde la mediación, conciliación, evaluación neutras y la aplicación de la filosofía de la paz con la acentuación de la justicia restaurativa, la que tiene como fin tomar la esencia individual y colectiva de la humanidad, con el hecho de evitar la decadencia con el rescate de los valores.

Por eso,  por la vía diplomática, en un sentido común social, es un tercero facilitador en administración de crisis y conflictos, tiene el nivel de manejo calificado de  herramientas de empatía y imparcialidad de ayudar a entrelazar puentes de comunicación, con la finalidad de lograr por medios colaborativos acuerdos hechos a los interese y necesidades de las partes.

Para muchos, estas lineas son muy trilladas y comunes y, no queda mas en el papel de nobles intenciones; pero no son así, sino son un momento de renovación de nuestro compromiso como facilitadores del diálogo y la paz, ante los eventos sucedidos  de cada año en donde nos enfrascamos con el objetivo de ayudar al prójimo en la búsqueda  la solución de conflicto. A diferencia de los métodos adversariales, es el tejer los intereses comunes en la misión de establecer un buen entendimiento entre las partes en conflicto.

Recuerdo, en varios artículos al darles lectura de los Maestros Javier Ales y Virginia Domingo, hago mio  su linea de pensamiento, el de fomentar la paz, para contribuir a tener un mundo mejor, con menos violencia.

Muy feliz año 2018, mis mejores deseos y renovemos cada día, nuestro compromiso y vocación de un Quijote y un Gandhi en ser constructores de puentes por la paz

FELICES FIESTAS !!!!!

Pino de la Paz

"Paz en la tierra, a los hombre de buena voluntad", así comenzamos .

En cada año, ya al inicio del mes de diciembre, es común alrededor de las organizaciones el esperar con ansias, el periodo vacacional, y por otra parte el preparar las celebraciones de posadas, con las exquisitas viandas del menú de la temporada, y de paso el desearse los mejores éxitos del año próximo a comenzar, con el propósito de todos de los buenos deseos.

En si, la época navideña, es un momento de alegrarse en por varios motivos, el primero el celebrar la venida del mesías, hijo de Dios hecho hombre en un aspecto espiritual en el mundo cristiano, por otro parte es agradecer a nuestro Señor el finalizar un año más, con vida y salud. 

Y por último, en mi opinión la  temporada navideña,  es la paz, y la concordia, para sanear cualquier desavenencia de en las relaciones personales y poner un alto al conflicto por medio pacíficos 

La natividad del Señor, no solo debe ser los aspectos materiales y vanale, sino los buenos deseos de paz, en un momento de la búsqueda de la reconciliación, en los aspectos  internos con nosotros mismos, y del mismo modo en lo externo en las relaciones  a mejorar con nuestro prójimo, todo en el animo de construir puentes de paz y buen entendimiento. 

Al hablar, de conmemorar el nacimiento de nuestro Señor Jesucristo en una reunión intima y emotiva  cena familiar, rodeado de suculentos platillos, y al terminar a la media noche, nos sentamos en frente del pino y del nacimiento en la compañía de nuestros pequeños hijos, hijas y sobrinos, con las ansias de recibir los regalos de la ocasión que con tanta ilusión han esperado en el transcurso de año por premio por su buen comportamiento. Sin embargo, un detalle a resaltar, un presente muy asertivo, con un plus sería el insistir el retomar los valores de humildad, tolerancia, respeto, empatía entre otros, con el fin  de sembrar  y cosechar la semilla de la paz.

Aún más, esa semilla de la paz, sea además de un super regalo, a la vez un propósito de año nuevo, con la finalidad de construir entre nosotros caminos de diálogo y buen entendimiento con el entorno social y la comunidad.

Por tal razón, la semilla de la paz rinda frutos en el año venidero, con la firme intención de contribuir a parar los excesos de conflicto y violencia.

Muy felices fiestas!!!!!