Antes de nada, los fines de semana, son para algunos el dedicarle tiempo a la nuestra familia, y para algunos en forma de Don egoísta, el darnos un espacio a nuestra persona, los gusto y hobbies; pero sin olvidar a los chiquitines, parte componente de esta organización. Con respetos, en días pasados, en unos de mis últimos artículos citaba la maestra Paty Servin, al analizar sobre el principio del interés del superior al menor, ya en la práctica de los métodos colaborativos. Es decir el momento de la reunión de la mediación familiar el establecer el puente de comunicación entre los padres en conflicto es una labor, con el propósito despersonalizar el conflicto, y llevarlos por el sendero de centrarlos a negocias en necesidades e intereses.
Por lo que se refiere al artículo de la maestra Paty Servin, en la elaboración del convenio, ya cuando se supero el bache emocional de los padres, da una guía de serie de preguntas, con el hecho de abrir y despertar el diálogo respetuoso entre la pareja, cada uno de ellas se va aplicando en su momento del desarrollo de la reunión, con la buena intuición de la creatividad.
La forma de llevar a cabo una pregunta, en mi opinión, al realizarla con la delicadeza, de un tono de amabilidad de un buen anfitrión, desechando al principio todo rasgo de morbo, de hecho de una acusación con la intención de formular un juicio, el de hacer un lado de elevar los grados de violencia, entre otras cosas. Al contrario, al formular un cuestionamiento libre de todo vicio, de la pauta a crear la empatía del facilitador a los mediados, y de ellos mismos entender lo que está pasando a través del conflicto.
Aquí, comparto algunos ejemplos de preguntas muy sutiles, aquí me permito transcribirlas del articulo de la abogada mediadora Paty Servin:
..." los padres pueden empezar a construir acuerdos que sean positivos para los menores, empezando desde ¿Dónde vivirán? ¿En qué lugar pueden estar más seguros? ¿Quién tendrá la Guardia y Custodia? ¿A dónde irán los menores a la escuela? ¿Será una escuela pública o privada? ¿Quién costeará los gastos? Y en época de regreso a clases ¿Como se cubrirán los gastos extraordinarios? Tienen los pequeños actividades extracurriculares ¿Cómo se cubrirán los costos y quién llevará y recogerá al menor? Y ¿Qué hay con la ropa de los pequeños? ¿Cuándo se comprará y con qué recursos? ¿Qué pasará con los regalos del día de Reyes y los de fechas especiales? ¿En qué consistirá la pensión alimenticia? ¿Qué cantidad se fijará? ¿Cómo se pagará? ¿En qué fechas? ¿Tendrá algún incremento anualmente? ¿Cómo se definirá? ¿De que manera el padre no convivente podrá visitar al menor? ¿Cómo se acordará la convivencia de fechas especiales como son los cumpleaños o el día de la madre o el día del padre, o la Navidad o el Año Nuevo?"...
De lo anterior se da una serie de preguntas, las que ayudaran a construir un acuerdo, en el cual se presuma lo más favorable del principio de intereses del menor.
En conclusión, la mediación familiar en los divorcios, no busca la desunión; sino un nuevo enfoque a la familiar en el desarrollo de los hijos, en pocas palabras, se busca tengan un futuro favorable a sus condiciones.
fuente: http://mediacioncdmx.wixsite.com/pattyservin/single-post/2017/05/24/La-Mediaci%C3%B3n-y-el-inter%C3%A9s-superior-del-menor