¡Yo Si Creo en la Mediación! Parte I

Una Pequeña Reflexión.

Hace unos días, circulo en las redes sociales un Post de uno de las apóstoles de la medición, del Maestro Rafael Lobo, resume en una frase el andar de mucho años sembrando, cultivando  y difundiendo la cultura de la Paz, motivo por el cual varios compañeros comulgamos  con la filosofía la mediación. al  citar, una la frase,  "Yo Si Creo en la Mediación". Del mismo modo nos invita a reflexionar

Una cita, que no solo queda en un muro, como es el paso de acción poética a fin de apreciarse como un arte impresionista de un Monet, sino en mucho años de trabajo de  varios  colegas mediadores de todas las latitudes de globo terráqueo, al realizar nuestra labor de convencimiento desde diferentes campos de batalla con el propósito de hacerlo en tierras fértiles para cultivar y cosechar la semilla de la paz.

Los que nos formamos con la vocación de ser facilitadores en mediación, ha sido un llamado al espíritu  pacifista de contribuir no en una forma unilateral por la paz, sino en entrarle en un trabajo colaborativo con las partes en conflicto,  por la razón de ayudarles a encontrar una solución al problema que traen arrastrando

Al creer en la mediación renovamos la vocación de pacifista y estar convencido en cada reunión de negociación de emplear las herramientas a fondo, en primer lugar el aplicar la escucha activa, el parafraseo, la empatía, la asertividad entre otras, en dirección a que los legitimamos a resolver su controversia y, ellos, en base a la retroalimentación transiten de buscar las oportunidades de mejora, o sea en otras palabras el hacerse responsables proactivos en la construcción de acuerdos bajo el principio universal de ganar- ganar.

El creer en la mediación implica ser un pacificador neutral desde la más grande tribuna, hasta la más humilde, al fomentar el dialogo como una salida para algunos sencilla; no obstante difícil a los que cada dia  edificamos puentes de consensos.

Por otra parte, el creer en la mediación, es una vía idónea de ayudar a la recomposición de las relaciones de las estructuras sociales, a fin de enseñar a transformar la comunicación destructiva a pasar  a la constructiva. 

Por esa razón, el rol del mediador en su esencia de ser neutral,  es ser como las garzas, el no ensuciar su plumaje con el objetivo de ser la luz de faro con respecto de fomentar, el inculcar en creer y tener confianza en la mediación.